5 causas principales del fallo de baterías 

  1. Terminales sueltos y conexiones entre celdas 
  1. Envejecimiento 
  1. Sobrecarga o descarga excesiva 
  1. Fugas térmicas – El calor es la principal causa de los fallos en las baterías. La duración de la batería se reduce a la mitad por cada incremento de 8 °C de la temperatura media. 
  1. Ripple – componente de corriente alterna que queda tras rectificarse una señal a corriente continua. 

Cuando una sola batería de toda una cadena falla, toda la cadena se desconecta y además se ve afectada su vida útil ya que una batería defectuosa eleva la tensión de carga de las baterías adyacentes, debido a la configuración del cargador. 

En el peor de los casos una batería con un nivel elevado de impedancia puede sobrecalentarse e inflamarse o explotar durante la descarga. Las medidas de tensión por sí solas no detectarán este peligro. 

Principales indicadores del estado de una batería 

  1. Resistencia interna de la batería 

La resistencia interna es una prueba de la vida de la batería, y no una prueba de su capacidad. La resistencia de la batería se mantiene relativamente constante hasta que se acerca el final de la vida de la batería. En ese punto, se incrementa la resistencia interna y se reduce la capacidad de la batería. Medir y realizar un seguimiento de este valor ayuda a identificar cuándo es preciso sustituir una batería.  

Utilice exclusivamente un analizador de baterías especializado diseñado para medir la resistencia de las baterías mientras la batería esté en servicio. Lea la caída de tensión en la corriente de carga (conductancia) o la impedancia de CA. Ambos resultados estarán en ohms. 

Una única medida en ohms tiene poco valor sin contexto. Es recomendable registrar los valores en ohms durante meses y años para poder comparar cada vez los valores obtenidos con los valores anteriores y crear una línea base de comparación. 

(Imagen) 

  1. Pruebas de descarga 

Las pruebas de descarga son la forma definitiva de averiguar la verdadera capacidad disponible de una batería, pero su ejecución puede ser complicada. En las pruebas de descarga, la batería se conecta a una carga y se descarga a lo largo de un período específico de tiempo. Durante este período de prueba, se regula la corriente para que su valor sea constante mientras se mide la tensión a intervalos regulares. Se miden los valores de la corriente de descarga, la duración de la prueba y la capacidad de la batería en amperios hora, y se comparan con las especificaciones del fabricante. Por ejemplo, una batería de 12V 100 Ah (Amper-hora) puede requerir una corriente de descarga de 12A para un período de ocho horas. Normalmente, se considera que una batería de 12V está descargada cuando su tensión entre terminales es de 10,5V. 

Las baterías no admiten cargas críticas durante e inmediatamente después de una prueba de descarga. 

Transfiera las cargas críticas a un banco de baterías diferente hasta que se haya completado la prueba, y después reconecte una carga temporal de un valor equivalente a las baterías que desea verificar. Además, antes de llevar a cabo la prueba, prepare un sistema de refrigeración para compensar el incremento de la temperatura ambiente. Cuando las baterías grandes se descargan, liberan una cantidad significativa de energía en forma de calor. 

SISTEMAS DE BATERÍAS DE RESERVA

Los sistemas de baterías de reserva son fundamentales para garantizar que las operaciones esenciales siguen su curso en caso de cortes en el suministro eléctrico. 

Instalaciones como centros de datos, hospitales, aeropuertos, servicios públicos, instalaciones de petróleo y gas, o ferrocarriles no pueden funcionar sin una alimentación de reserva con una fiabilidad del 100 %. Incluso las fábricas y los comercios más normales tienen sistemas de alimentación de reserva para sus sistemas de emergencia, alarmas y controles, iluminación de emergencia y sistemas de control de vapor y prevención de incendios. 

La mayoría de los sistemas de alimentación de reserva utilizan un sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) y varias baterías en serie. El SAI asegura la alimentación del sistema de control digital (DCS) para mantener el control de las operaciones de la planta hasta que puedan apagarse todos los sistemas con seguridad o hasta que el generador auxiliar arranque. 

Aunque la mayoría de las baterías utilizadas en los SAI actuales no requieren mantenimiento, siguen siendo susceptibles al deterioro por corrosión, cortocircuitos internos, sulfatación, secado y fallo en el sellado. Este artículo resume las prácticas recomendadas para mantener estos «bancos de baterías» en buen estado y garantizar que estén listos en caso de avería eléctrica.